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La teta es el único alimento que el bebé necesita para crecer fuerte y sano. Además es sinónimo de amor.
La mamá debe tener una alimentación variada y completa para que este acto sea verdaderamente un escudo que proteja al recién nacido. Los alimentos que debería incluir en sus comidas, son los siguientes: trigo, cebada, arroz integral, avena, frutas y verduras variadas, cocidas o crudas, lácteos descremados, carnes, huevos y pescado, lentejas, garbanzos y porotos. Grasas en poca cantidad, aceite de oliva, soja y canola, nueces, almendras, semillas de lino y chía y palta.
La mamá tiene que estar bien hidratada; para ello debe beber a diario entre 2 y 3 litros de agua u otros líquidos no calóricos, no fumar, no beber alcohol ni tampoco iniciar una dieta alimentaria sin control médico.
Debe darle al bebé sólo la leche materna, salvo que esté indicado médicamente lo contrario, amamantándolo durante las 24 horas del día, a libre demanda. Colocará el pezón y la areola dentro de la boca del pequeño para evitar las grietas y el dolor. Si la mamá trabaja o se ausenta de la casa por alguna razón, debe bombear el pecho en el mismo horario que se alimenta su bebé normalmente y dejar mamaderas refrigeradas con su leche.
La lactancia materna puede evitar: 1) el 22% de las muertes durante la primera hora después del nacimiento. 2) el 16% de muertes de recién nacidos alimentados con leche materna las primeras 24 horas de vida. 3) 1,3 millones de muertes anuales de niños menores de cinco años si han tenido lactancia materna exclusivamente hasta los seis meses.
Amamantar al bebé beneficia a la madre de la siguiente forma: 1) reduce el sangrado posparto. 2) refuerza el vínculo con el recién nacido. 3) retrasa el reinicio del ciclo menstrual. 4) mejora la glucemia de la diabetes gestacional. 5) fortalece el rol materno. 6) disminuye el riesgo de fracturas de caderas. 7) es más práctico y económico. 8) ayuda a recuperar la figura. Las mamás que amamantan bajan su peso más rápido que aquellas otras que no lo hacen. 9) se reduce el riesgo de padecer cáncer de ovario, de mama y osteoporosis.
Pero también beneficia al bebé en lo siguiente: 1) le garantiza leche segura y fresca. 2) lo provee de una óptima nutrición. 3) lo protege contra enfermedades. 4) fortalece el sistema de defensas. 5) lo protege contra intolerancias alimentarias y alergias. 6) la teta le calma la sed hasta los seis meses. 7) se reduce el riesgo de diarria e infección respiratoria. 8) baja el riesgo de obesidad en la niñez. 9) promueve el desarrollo correcto de mandíbula y dientes. 10) disminuye el riesgo de enfermedades cardíacas. 11) incrementa la función cognitiva. .12) incrementa el lazo afectivo con la madre.
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