Existe una técnica llamada dermatoscopía que hace posible hacer un análisis de los lunares con una luz especial -llamada luz polarizada- y una lupa de mucho aumento.
Los equipos de nombre videodermatoscopía, usan una pantalla para poder ver los lunares.
Les da la posibilidad de fotografiarlos y hacer un mapeo de los lunares, para así poder efectuar una comparación de imágenes en futuros estudios y verificar si se han producido cambios en alguno de ellos.
Un sistema que tiene estas características, es el Diar-D. En los sistemas de mayor modernización se han incorporado los procesamientos de las imágenes automático.
Equipos tales como el Fotofinder, dan la posibilidad de hacer la videodermatoscopía y tener un registro o mapeo de lunares en forma automática. En este caso, el que detecta la aparición de nuevos lunares o de cambios, es el sistema computarizado.
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