Los polifenoles tienen potentes beneficios para la salud y son parte de los componentes de los alimentos de origen vegetal.
Los encontramos en las frutas frescas (guindas, frutillas, moras, arándanos, ciruela, kiwi, manzana, uvas rojas, cítricos, pera), en las frutas secas, como el maní y en las especias, como la canela. También en las hortalizas (piel de la berenjena, repollo colorado, brócoli y cebolla), en el cacao y el chocolate e incluso en el vino. El té negro, verde y rojo también lo aportan.
Los polifenoles los producen las plantas para protegerse contra bacterias, virus, insectos, hongos, el sol y la sequía y pertenecen a un grupo llamado fitoquímicos o fitonutrientes.
Actúan como un escudo defendiendo al reino natural, pero además les proveen el aroma, el color, el sabor y la textura al alimento que los contiene.
Existen miles de fitoquímicos involucrados en múltiples funciones, pero sólo se han estudiado unos cientos de ellos.
Entre otras cosas, la vitamina C mantiene la piel firme y elástica retardando el proceso de envejecimiento, el pescado reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, atrasa la aparición de cataratas, hipertensión, infecciones urinarias, el jugo de naranja y la leche descremada previene la osteoporosis, el brócoli, las zanahorias y las batatas son antioxidantes, el yogur proporciona calcio, refuerza las defensas y si es descremado baja la tasa de colesterol y disminuye también el riesgo de otras afecciones crónicas.
Al actuar conjuntamente con la fibra y otros nutrientes, promueven la salud.
Es bueno saber que una misma hortaliza o fruta puede tener distintas cantidades y tipos de fitonutrientes. Por ejemplo, la naranja tiene más de 170 variedades.
Entre los polifenoles están los ácidos fenólicos y los flavonoides que, al igual que otros subgrupos, cumplen distintas funciones: reforzando los antioxidantes en las células, neutralizando los radicales libres, que dañan las células, manteniendo saludable el tracto urinario, el sistema de defensas y la visión, contribuyendo también al buen funcionamiento del cerebro y protegiendo el corazón.
Consideremos todos los beneficios que nos aportan y, si deseamos garantizar a nuestro organismo gozar de buena salud, no olvidemos incluir diariamente 5 porciones de hortalizas y frutas y habremos hecho algo muy importante por nosotros mismos.
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