Son muchas las razones por las cuales las personas se están volcando cada vez más a la Homeopatía Unicista. Entre ellas: 1) Porque se cansaron de recibir tratamientos que le curan una enfermedad y le aparece otra. 2) Porque están hartos de que los paseen de especialista en especialista, que sólo ven una parte de ellos y no los tienen en cuenta como una totalidad. 3) Porque necesitan precisamente eso, recurrir a un médico que los atienda tanto por problemas gástricos, como por un dolor de cabeza, por trastornos renales o cardiológicos, psíquicos o neurológicos. Se trata de encontrar un médico a quien poder contarle lo que les pasa, sus frustraciones, temores y hasta contarle sus más íntimos secretos. 4) También porque han visto los resultados y cambios obtenidos por personas cercanas, luego de haber sido tratados por un Homeópata Unicista y haber recibido la medicación adecuada.
La Homeopatía Unicista trata a la persona como una unidad, la que puede estar o no en armonía. Cuando esa unidad no está en armonía, devienen las enfermedades. Aparecen diferentes trastornos como la ansiedad, el nerviosismo, la inquietud, no duermen bien, etc. O sea, todos los órganos de la persona están bien pero ella se siente enferma. Esto se produce como resultado de una desarmonía de la Energía Vital. Si se lo trata cuando aparecen los primeros síntomas se podrá evitar que aparezca alguna enfermedad más seria en el futuro.
La Homeopatía Unicista trata toda índole de enfermedades, tales como psoriasis, asma, hipertensión arterial, diabetes, herpes, alergias y aún aquellas consideradas incurables, como algún tipo de cáncer.
La Homeopatía es la que expresa con mayor énfasis que no hay enfermedades sino enfermos. Vale decir, es más importante saber quíén es el paciente, qué tiene o qué siente y averiguar cómo sufre, que saber de qué sufre y su diagnóstico clínico.
Para la Homeopatía, la salud no es simplemente lograr que desaparezcan los malestares físicos, sino principalmente liberar al paciente de los conflictos internos que están condicionando su vida. Por eso el tratamiento se dirige al mismo centro de la enfermedad, que es armonizar la Energía Vital.
Según la falta de armonía que tenga cada paciente en particular, el médico podrá evaluar la posibilidad de curación. O sea que la posibilidad estará dada por el grado de desarmonía vital y no por el diagnóstico de la enfermedad en sí misma.
Es importante señalar que la Homeopatía Unicista no deja de lado la posibilidad de que un paciente realice tratamiento psicológico o sea visto por un especialista. Por el contrario, con la ayuda de esta asistencia, la curación del paciente será más eficaz y más rápida.
Fuente: Prof.Dr.Eduardo N.Imventarza-Prof.Tit.Homeopatía Unicista.
Elsa Inés Bernardi Semino
Elsa Inés Bernardi Semino
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