OBESIDAD - DE QUE SE TRATA

La obesidad es una enfermedad crónica, cuya característica es que hay un aumento de células de grasa del cuerpo. Da origen por una combinación entre los "genes engordantes" y determinados hábitos en el estilo de vida que la persona lleva.

Entre ellos mencionamos los siguientes: 1) Sedentarismo 2) Consumo de grandes porciones de alimentos con muchas calorías, especialmente ricos en azúcares y grasas). 3) Bajo consumo de fibras (cereales integrales, hortalizas y frutas). 

Los genes engordantes podrían ser de origen hereditario. Influyen sobre el metabolismo, la actividad física y el apetito y sólo determinan una tendencia manifiesta si se sigue el estilo de vida mencionado arriba. 

No hay una explicación científica que permita apoyar la conocida afirmación "no como y engordo".

Una vez establecida la obesidad, queda para siempre. Sin embargo lo que queda es sólo una predisposición; ello no significa que sea incontrolable o inevitable. Si el individuo cambia sus hábitos de movimiento y alimentación, bajará de peso y podrá mantenerlo todo el tiempo que duren las modificaciones. Debido a eso se suele decir que los obesos pueden controlarse o recuperarse, pero no curarse.

La tendencia que sostiene el exceso de peso se va perpetuando por mecanismos de negación y creencias ilógicas. Por ejemplo "un poco, qué me va a hacer", "esto o aquello otro tiene la culpa", "este es un fracaso más", "tengo que dejar el tratamiento", "soy un caso perdido", "mañana empiezo" y tantos otros... la lista sería muy larga. 

Realizan conductas que no favorecen en nada la meta para adelgazar, tipo: comprar alimentos sin un plan previo o hacerlo cuando se tiene hambre, moverse poco, hacer dietas demasiado restrictivas que en lugar de ayudar generalmente terminan en un atracón. Una emoción negativa que puede influir mucho, es enojarse por no lograr adelgazar a la velocidad esperada.

Todos los mecanismos puestos a modo de ejemplo, pueden reemplazarse poniendo en práctica cambios de conducta y sostenerlos en el tiempo.

El By-Pass Gástrico le permite reducir entre un 70% y 80% del exceso de peso. Veamos qué pasa el día después del by-pass.

Las primeras dos semanas y hasta la sexta semana, los cambios en la alimentación son notables. Esto es así porque se debe realizar la llamada dieta "blanca", a base de queso crema, gelatinas, etc. y además "blanda" o sea no se puede ingerir nada sólido. Por otra parte la cantidad se reduce drásticamente. Lo que al principio parece molesto, cuando se comienza a ver la pérdida de peso pone tan bien a la persona que la predispone muy favorablemente a continuar el tratamiento. Esto coincide con la incorporación progresiva de alimentos simples hasta que se llega a consumir la mayoría de los alimentos, en pequeños bocados y porciones. La realidad es que el estómago no puede recibir demasiada comida y es muy importante que cuando la persona esté satisfecha deje de comer, porque si se excede el límite del estómago se puede producir el vómito. Esto es así porque el alimento no tiene dónde ir.

Tenga muy en cuenta que el by-pass no elimina las tentaciones, por lo que deberá controlarse en este sentido, siendo el mejor consejo evitar tener al alcance de la mano golosinas, chocolates, gaseosas no dietéticas, etc. que son alimentos fáciles para tragar pero que pueden dañar ingerirlos sin control.
Fuente: "Vivir mejor con el Dr.Cormillot"
                                                                                                     Elsa Inés Bernardi Semino